Pero se lo abandonó en busca de fama, minitas y alcohol. Hasta que el otro día mi cuñado me dijo que no lo actualizaba nunca.
Así que mientras trato de convencerme de que la historieta es el camino, y trato de sentarme y hacer de una vez la mil paginitas que tengo que hacer, boludeo inocentemente sobre un par de hojas y sale esto.
Que disfruten ustedes, espectadores imaginarios, de estos escapismos del trabajo que debería estar haciendo.
Una clase de escultura como cualquier otra |
Una clase de grabado como cualquier otra (boceto) |
Una clae de... no, ni idea. pura huevada que estaba haciendo por que sí. |